El estrés excesivo provoca un aumento de la tensión neuromuscular, produciendo en la boca y los dientes una serie de efectos negativos.
Constantemente el dentista detecta los síntomas orales producidos por el estrés. Estos pueden ser muy perjudiciales para nuestra salud buco-dental, y es importante que los pacientes los conozcan para que sean tratados a tiempo.
Síntomas del estrés en los dientes:
- La punta de los dientes está aplanada
- El esmalte de los dientes se desgasta, lo que causa una sensibilidad extrema
- Hendiduras en la lengua
Si detectas algunos de estos síntomas, es importante acudir rápidamente al odontólogo para que te prescriba un tratamiento. Si se padece un estrés crónico, una pieza dental puede desgastarse hasta en un 30%. Esto provoca graves afectaciones a los nervios por el estrés al que han sido sometidas las piezas dentales durante años. Si no se trata el estrés con suficiente antelación pueden provocarse los siguientes daños:
Consecuencias del estrés en los dientes:
- Sensibilidad dental.
- Microfracturas del diente que producen sensibilidad dental o dolor dental.
- Fracturas dentales que originan la pérdida del diente.
- Dolor de la articulación temporomandibular (ATM) por comprensión de las fibras nerviosas.
- Disminución de la saliva debido a una menor producción por parte de las glándulas salivales sometidas a un tono adrenérgico, lo cual a su vez facilita la producción de caries.
Los efectos negativos del estrés no solo afectan a los dientes naturales, si no que también perjudican las restauraciones dentales y las prótesis e implantes.
Secuelas:
- Se producen facturas de los empastes por el exceso de carga mecánica, por este motivo pueden romperse las piezas endodonciadas, a las que se ha matado el nervio.
- Rotura de la porcelana de las coronas o puentes de metalporcelana.
El estrés también puede estar relacionado con otras patologías como el bruxismo, los trastornos temporomandibulares, enfermedades en las encías o úlceras en la boca.
Si no estamos seguros de ello, pero sospechamos que el estrés está afectando a nuestra boca, es recomendable pedirle a nuestra pareja o un allegado que se fije en nosotros para tratar de detectarlo. Existen ciertas manifestaciones que delatan esta afectación como rechinar y apretar los dientes mientras dormimos. Por otra parte, según las encuestas, esta enfermedad es típica en hombre entre los 30 y 50 años. Si encajamos con ese perfil, es aconsejable pedir una revisión a nuestro dentista. ¿Sospechas que el estrés está afectando a tu salud? No dudes en pedir una cita.